La iluminación del poeta

Filed under: Scrapbook | Tags: | diciembre 6th, 2010
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Para una concepción romántica como la de Schiller, Novalis, Schlegel o Goethe, el artista era concebido como sacerdote, mago, vidente, iluminado que operaba sobre la materia y experimentaba con las formas. Siguiendo esta línea, los escritores simbolistas entendían que el mundo no era una apariencia capaz de ser comprendida por medio de la razón del ser humano corriente sino que únicamente los poetas, seres de particular clarividencia, podían llegar a comprender sus ocultas relaciones, convirtiéndose ellos mismos en una suerte de magos que lidiaban con un lenguaje inédito y secreto. Para Mallarmé, por ejemplo, el poeta no era aquel que nombraba y describía al mundo, sino un intermediario entre los secretos del universo y el resto de los hombres.

Un aspecto esencial de las vanguardias fue una nueva concepción del escritor como «operador», es decir, no como genio creador ni como ser de especial clarividencia, sino como combinador de elementos e investigador de las relaciones ocultas del lenguaje. La voz subjetiva se borraba, cediendo en cambio la iniciativa a las mismas palabras.


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