Las escrituras del “más allá”

La ocultista y teósofa rusa Madame Blavatsky solía recibir regularmente mensajes de dos espíritus: Koot Hoomi y Moorya. ¿Qué cómo los recibía? Pues muy fácil: estos caían en forma de papelitos escritos desde el techo de la sala durante las sesiones de espiritismo de Madame. Helena.Blavatsyi, a su vez, se dedicó una vez muerta a enviaba sus propios mensajes desde el más allá. En este caso, no arrojaba papeles desde lo alto sino que se posesionaba de los cuerpos de otras personas quienes, entrando en trance, escribían con la misma letra manuscrita de la medium. Otro personaje que también se arrogaba el tener acceso a escrituras del más allá era John Dee (1527–1608), el mago de la reina Isabel I. Dee relataba cómo imágenes de las letras aparecían en su bola de cristal, pero también se quejaba de que era imposible copiarlas debido a que permanecían allí demasiado poco tiempo y eran tan débiles -dibujadas en una extraña tinta color amarillo muy pálido- que apenas si se veían. Fue entonces cuando el famoso alquimista Edward Kelly decidió ayudarlo dedicándose a sobreescribir los trazos con su pluma antes de que estos se evaporaran y desaparecieran definitivamente. Pero claro, Kelly se quejaba a su vez de que tenía dificultades en hacerlo debido a la superficie esférica y resbaladiza de la bola.