Un dios dormido y un rey rojo

El Rey Rojo durmiento, ilustración de John Tenniel en Through the Looking Glass (1898)

El Rey Rojo (la pieza de ajedrez) es un personaje que aparece en el libro Alicia a través del espejo, cuya trama, precisamente, se desarrolla a partir de un juego de ajedrez. El Rey Rojo en realidad nunca hace nada sino que tiene a sus “súbditos” (las otras piezas rojas), haciendo el trabajo por él. Él ni siquiera tiene que moverse y, de hecho, permanece dormido a lo largo de todo el texto. Es más, cuando Alicia se lo encuentra la primera vez, está durmiendo profundamente, roncando tan fuerte que Alicia confunde sus ronquidos con los rugidos de un león. Alicia comprende que, en tanto que involucrada en el juego, ella misma no es más que una parte del sueño del Rey Rojo. Y que si él llegara a despertarse, ella “se apagaría como una vela con un soplo”. Cuando la partida de ajedrez termina con el jaque mate de Alicia (peón blanco) al rey, ella se pregunta si, en realidad ella fue parte del sueño del rey o el rey fue parte de un sueño de ella. Y esto es más o menos lo que decía también, entre otros, Antonio Machado:

“Anoche soñé que oía
a Dios, gritándome: ¡Alerta!
Luego era dios quien dormía.
y yo gritaba: ¡Despierta!”