El viaje de Coco y Burbuja en busca de la Iluminación (1)

En un humilde ático del barrio de Vallecas, el niño Burbuja y su amigo Coco buscan la verdad del Universo. Para ello, han montado un laboratorio experimental con embudos, cubos, cables, electro-magnetos, transistores, un microscopio y una Apple Macintosh modelo G4 Cube. Allí, han probado con toda clase de fenómenos, desde la electrostática hasta las jaulas de Farraday. Sin embargo, distan mucho de encontrarla. Burbuja no está nada satisfecho. Coco, por su parte, comenta:

-La posibilidad de saber qué es el Universo es muy remota, puede que no se concrete nunca y, en todo caso, es posible que al final la respuesta que encontremos sea terrorífica o decepcionante. Ante semejantes perspectivas, yo creo que lo mejor es no pensar demasiado en ello y mantenerse ocupado con alguna otra cosa.

Pero Burbuja insiste:

-Es imperativo que encontremos respuestas. El sentido de su vida depende de ello. ¿Qué es el Universo? ¿Quiénes somos nosotros? ¿Es nuestro Dios también el Dios de los marcianos? -se pregunta cada vez más angustiado.

-Pues no creo que podamos encontrar las respuestas. Al menos, no en este laboratorio -Coco concluye, dando suaves palmadas en la espalda de su exaltado amigo a fin de confortarlo.

-Entonces, deberemos salir a buscarlas en algún otro sitio -intima Burbuja.

Y así es como los amigos deciden salir a recorrer el Universo valiéndose de un Atlas cósmico que, precisamente, acaban de diseñar en el ático de Vallecas.